No permita que en las discusiones con su pareja salgan a relucir viejos conflictos que lo obligan a luchar por tener la razón. No quiera tener siempre la última palabra. Ganar una batalla puede llevarlo a perder la guerra. Utilice su sonrisa como arma seductora, con ella pondrá a sus pies a las personas que contradigan sus peticiones. Si tuvo altos y bajos en sus relaciones familiares, tendrá la impresión de que su situación se ha estabilizado. No soportará ni las presiones ni las exigencias. Necesitará libertad para vivir y hacer lo que quiera. Hoy, frente al mínimo atisbo de coacción, se sentirá como un León enjaulado.